| PUNTO DE LIBRO - Artes Adivinatorias |
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Comentarios: Emmain
Coordinación:Asun Lopez |
DESCIFRANDO LOS CÓDICES MAYAS 2012
Tito Maciá
Índig
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Un libro apasionante para los que gusten de las profecías, los que sientan fascinación por las culturas precolombinas o los saberes prooccidentales, las artes chamanísticas, los que amen la astrología y los que se preocupen por los efectos de cambio climático o los aficionados a los códices, las representaciones iconográficas antiguas y los lenguajes crípticos.
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Tito Maciá, el prestigioso astrólogo alicantino, nos sorprende con la precisión de datos astrológicos, astronómicos, metereológicos, entre otros, facilitados por los mayas a través de la reproducción de imágenes de elevado valor artístico pero sobre todo simbólico. Los almanaques que contienen tanto conocimiento a través de las figuras han pasado por no pocas vicisitudes y muchos fueron destruidos. Tras la ''conquista'' del nuevo continente algunos misioneros veían en estas representaciones un impedimento para su labor.
Sólo un prolongado trabajo investigador y una paciencia infinita podría dar lugar a este inmenso desafío que es descodificar el Código Dresde y con él desvelar la gran sabiduría que los mayas poseían tras la observación de los astros y los fenómenos climáticos. Muchos siglos antes de la creación del concepto ''ciencia'', los mayas fueron capaces de desarrollar un método predictivo infalible. Lo cual chocaba con el oscurantismo ultrarreligioso que dominaba Europa en la misma época. Otras culturas lejanas, luego despreciadas durante siglos, desarrollaban terapias, arquitecturas, artes y técnicas muy superiores que poco a poco van siendo rescatadas para la salvación de la civilización.
El que ya sepa de la milenaria cultura maya verá en el libro un tesoro, el que no tenga ni idea aprenderá de la mano del autor a admirarla y respetarla.
Aunque apreciamos sin duda el esfuerzo de Índigo por la publicación, ya que exige de la reproducción de numerosas imágenes, tal vez nos permitimos el lujo de proponer una próxima reedición incluyendo el color rojo que en los ejemplares actuales son grises.
La coincidencia milimétrica de otras predicciones que han podido ser comprobadas desde su existencia, hace mil años, añade un buen monto de inquietud al hecho de que el calendario milenario finalice su recorrido en el ya muy cercano año 2012. Tito Maciá huye del tremendismo pero pone el acento en la seriedad del problema que nuestro impacto sobre el planeta está teniendo en el clima. Por cierto, según el calendario maya, mi lunación corresponde a Muan o de la lechuza, la decimotercera constelación. ¿No tienes curiosidad por saber la tuya?