| PUNTO DE LIBRO - Crecimiento Personal |
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Comentarios: Emmain
Coordinación:Asun Lopez |
EL ANIMAL DE LA FELICIDAD
Ronda Byrne
Editorial Urano 2017
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Un libro magnífico que cuesta identificar como tal por el título y las ilustraciones (bonitas, pero demasiado infantiles) de la portada. La traducción del título es literal de su original inglés, pero tal vez tiene otro sentido en un contexto anglosajón. La hipótesis que barajaría es que el autor, Will Jelbert, considera que el humano sólo necesita identificar y cultivar algunas de las habilidades compartidas con otras especies para convertirse en un ‘‘Animal Feliz’’. De hecho, recoge una frase de Séneca que dice que hemos nacido para la felicidad. Mira por dónde, un viejo sabio cordobés de principios de nuestra era se convierte en faro de lo que más nos importa a través de un australiano que tuvo que partirse la cara literalmente para asumir un nuevo estilo de vida.
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Es una lectura útil, amena, inspiradora, que aporta novedades sin cargar demasiado en ninguna de las recetas comunes que constituyen un típico libro de autoayuda. El autor reconoce que no existe un estado de felicidad permanente, pero ha hecho un gran trabajo desmontado algunos de los mitos que contribuyen a que seamos menos felices.
Parte de la idea, demasiado extendida, claro está, de que ‘‘la felicidad viene condicionada por la presencia o ausencia de algo externo a nosotros’’.
Will Jelbert se licenció en Lenguas Modernas, y se le nota que le gustan las palabras: las exprime, las estruja, les saca todo el jugo y te las devuelve crudas. Parece también que es algo obsesivo, porque no para de presentar datos y curiosidades. Es como si nos regalase lo más selecto de miles de lecturas. Pero en este caso no de un modo literal sino altamente procesado, y en muchos casos provocador. Por eso es un título que vale la pena, porque no es fruto de unas semanas, ni de un impulso repentino de regalar topicazos; es un texto muy personal y a la vez muy estimulante para que el lector se cuestione a sí mismo y, si lo quiere así, se despoje de capas de creencias impuestas, muchas de ellas amenazas fehacientes para la felicidad.
Es un libro un poco caótico y desigual que puedes coger y dejar sin problemas; lo ideal sería que en algún momento parases la lectura para poder interiorizar, analizar y, si lo crees necesario, resetear alguna creencia o comportamiento que te está privando de tu derecho a ser feliz. La honestidad, la amabilidad, la tolerancia, la conciencia y el coraje son los músculos que, en caso de desarrollarlos, nos pueden convertir en ‘‘cachas’’ de la felicidad.
Estamos seguras de que dentro de este libro se cuelan viejos consejos y nuevas propuestas que igual no te hacen feliz como una perdiz, pero sí más feliz de lo que serías sin haberlo leído.